Editorial del numero XLIV - Fundación de un grupo bahreiní de artes populares
Número 44

A lo largo de las participaciones mundiales, a través de muchos años, tuve la
ocasión de ver muchos grupos internacionales, compuestos de distintas edades,
interpretando sus bailes nacionales, con las banderas de sus países, las indumentarias
tradicionales y sus admirables instrumentos musicales popular, expresando el espíritu de
la felicidad, que circula en la profundidad de su cultura, difundiendo alegría y armonía,
en ambientes festivos y alegres. Sentía aflicción, cada vez, por nuestra ausencia de estos
festivales y asambleas artísticas internacionales, a pesar de que no existe ningún
problema humano, ni económico o administrativo, en este asunto.
Es verdad, que la mayoría de nuestros países árabes, están en dificultades
económicas, pero derrochan mucho dinero en lo que no beneficia, y que toda la patria
desde el mar hasta el mar, están sus países en la desgracia de desunión, pero algún rayo
de luz, tiene que aparecer en un cercano horizonte. La historia de los pueblos, nos
enseñó, que las desgracias a las grandes naciones, les refunden, y que el arte a lo largo
del tiempo, es el medio de los pueblos, para conversar con el espíritu, dándole fuerza y
voluntad.
A través de esta aflicción, se me ocurrió una vez, que el número de parados, es
muy elevado, y sin duda, hay entre ellos genios y prometedores administrativos. Por
otra parte, en la mayoría de los casos, los árabes, se jubilan de sus trabajos, para
empezar a practicar otros independientes, normalmente, algún proyecto cercano a su
especialidad, o destreza. Una señora, me pregunto, después de jubilarse de su trabajo
administrativo, con que puede empezar, como proyecto, para invertir sus ahorros. Le
propuse, crear un grupo bahreiní de artes populares, se extrañó, y desaprobó la
propuesta diciendo: ¿quieres decir un grupo de baile?, le dije: si, un grupo de artes
populares, entre las que está el baile popular, que practicaron a través del tiempo, las
sociedades de Bahréin y del golfo árabe. Es un baile mímico, expresivo y modesto,
como el arte de Alfayri, Zaffan, Alarda, Almarrada, artes de Samiri y Jumari, que son
diferentes, de lo que se conoce sobre el baile oriental, de desnudar y exponer encantos
femeninos.
Empecé a explicar a la distinguida señora, la idea del proyecto, con la
cooperación de un maestro internacional, especializado en las artes mímicas, para
desarrollar nuestro baile popular, y crear bailes con dimensiones culturales, adecuados a
las exigencias de la época, a la energía latente de la nueva generación y animar a un
numero de chicas y chicos a practicar estas artes hasta dominarlas, para presentar a
Bahréin en los festivales nacionales y en los de las artes populares internacionales, para
exhibir las diversas creaciones de Bahréin. En la medida que va adquiriendo éxito,
tendrá apoyo privado y estatal. Le puse como ejemplos, la fundación del grupo bahreiní
para la música árabe, y el grupo de Mohamed Fares en 1997, con el apoyo de uno de los
bancos locales, así, como a modo de ejemplo, en la India, hay una academia superior,
para las artes del baile popular, su decano, es la profesora Barol Shah.
La señora, aparto el rostro diciendo: ¿Qué hay de las tradiciones, la mirada de la
sociedad, la intolerancia y muchas cosas más, que se va a decir de mí? Le dije: tu
sublime trabajo artístico y cultural perfecto, confirmara a todos, el valor de este trabajo
cultural, y su influencia en generaciones venideras, pero no se convenció.
En la república árabe de Egipto, hay una experiencia pionera en 1959 del grupo
de Mahmud Ali Reda y la artista Farida Fahmi de artes populares, que documento
numerosos bailes mímicos, relacionados con la historia y la grandiosa civilización de
Egipto. Es una experiencia, a pesar de todas las circunstancias y los obstáculos, sigue
aun viva.
En Líbano, existe la experiencia del grupo de Abdelhalem Carcala para artes
populares en 1968, que viajo con las artes libanesas y sirias en general, a todas las
regiones del mundo.
En Kuwait, el grupo de televisión de Kuwait en 1978, desempeño un papel, que
sigue presente y vivo, una experiencia para documentar las artes populares kuwaitís,
baile y canto, lo que hizo que este rico patrimonio esté más cerca, para las generaciones
venideras. El papel que desempeño la maestra Rabha Marzuq y la diseñadora Aicha
Mufreh ben Toq, era atractivo e influyente, gracias a la exitosa administración de los
artistas Ahmed Alcatami y Gannam Addican.
A pesar de los temores, que mostró la distinguida señora, y los obstáculos que
pueden mostrar otros, seguemos confiando en que la fundación de un grupo de artes
populares bahreiní, es un proyecto posible y realizable. Es una necesidad, que impondrá
nuestra realidad cultural, que tiene que cambiarse, porque la vida va hacia adelante, y no
permanece estable en un estado.
Ali Abdelah Jalifa
Redactor jefe